CONSEJOS PRACTICOS:
Llevar calzado
comodo y agua. Recomendamos los prismaticos y la
camara de fotos. Para bicicleta, casco y
material de repuesto. En caso de prolongar la
ruta por los puntos de fuga 3 y 4, tendremos
que disponer de un coche de apoyo, dada la
longitud del recorrido. Si se asciende a La
Hidalga y a los Riscos de Lirio, es aconsejable
calzar botas.
INTRODUCCION: (
Puerto de Lifa y Sierra Hidalga desde la Venta
de Ramiron)
Se trata de un
comodo recorrido siempre por carriles, que nos
permitira conocer lo que fue un encinar
mediterraneo convertido hoy dia en campos
cerealisticos y la transicion existente entre
estos y la sierra, donde subsiste una economia
tipica de montaña. Encontraremos los restos de
la Torre arabe de Lifa y el Bosque de
Cornicabras.
DESCRIPCION:
Tomamos como punto de partida la carretera de
circunvalación de Ronda en el cruce con la
carretera de El Burgo; desde el parking de un
hipermercado, parte un carril en dirección Este
que se dirige hacia la enorme mole de la Sierra
Hidalga. Un indicador de “El Legado Andalusi”
nos informa que estamos en la ruta de Los
Almoravides. Apenas hemos recorrido 100 m. se
pasa un pequeño puente sobre el arroyo de La
Toma, bajo el que se encuentra el nacimiento del
mismo nombre, poco han de durar las aguas
limpias del manantial pues a escasos 50 m. se
reciben las aguas residuales del Hospital
Comarcal de La Serranía.
El camino comienza
un suave ascenso con algunas viviendas en los
márgenes, a la derecha queda el cerro de La
Pastora; tras un fuerte repecho pedregoso se
abren unos amplios campos de cultivo, los Llanos
de Aguaya, en los que la calidad de la tierra ha
motivado que sean los más productivos
agrícolamente de los alrededores de Ronda, la
contrapartida ha sido la perdida de la cubierta
arbórea en las grandes extensiones llanas.
Algunos historiadores locales, sitúan en estos
campos el marco de la famosa batalla de Munda
entre Pompeyo y las tropas imperiales romanas;
nada probable a tenor de los escasos restos
romanos hallados.
A 3,4 Km. y junto
a un cortijo, parte a la izquierda un desvío
hacia el Pilar de Coca, Punto de fuga
nº 1, situado en el magnífico encinar del
Coto Cortina, uno de los caminos clásicos en los
recorridos con bicicleta de montaña, de seguirlo
conectaríamos con la ruta nº 2.
A 5,3 Km. justo
cuando abandonamos los últimos campos de cultivo
y comienza la parte más dura de subida se
encuentra la primera cancela; los matorrales son
cada vez más frecuentes, el camino se torna rudo
y si vamos en bicicleta habremos de extremar las
precauciones. Son abundantes las aves entre las
que destacan los abejarucos con importantes
colonias en los alrededores y los cernícalos; a
veces, en los llanos cultivados ha anidado el
aguilucho cenizo.
Tras pasar la
verja, a la derecha, encontramos el nacimiento
de la Hidalga que abastece a los cortijos de los
alrededores y que en tiempos pasados fue uno de
los aportes de agua a Ronda. La subida se
endurece en su discurrir zigzagueante entre la
vegetación de matagallos y esparrageras de los
márgenes del camino, siempre por nuestra derecha
vemos la cañada de la Hidalga, por donde un
torrente solo lleva aguas cuando las
precipitaciones son importantes. Las encinas son
escasas y las vistas son magníficas sobre la
ladera norte de Sierra Hidalga, donde aún
sobreviven algunos pinsapos, (abeto endémico de
la Serranía de Ronda). La cercanía a Ronda y la
presencia del camino de Lifa (en el que estamos)
debió ser la causa de la desapariciónde lo que
una vez fue el pinsapar más cercano a Ronda;
además, la dureza del trabajo de campo y la
escasa rentabilidad económica han traído como
consecuencia el abandono de muchos de los
cortijos que se esparcen por Sierra Hidalga.
A 9,2 Km. del
inicio parte a la derecha un carril en dirección
a la ladera de la Sierra Hidalga. Siguiendo el
camino de Lifa se llega muy pronto a una nueva
alambrada y una cancela, este lugar es el Pto.
de Lifa, desde ahí comienza un descenso que
termina en la cortijada de Lifa, a 12 Km. del
inicio de la ruta. Los llanos que rodean la
casa, se cultivan de trigo y garbanzos. Este es
el final del camino; aunque señalaremos dos
puntos de fuga más.
Punto de fuga
nº 2 consistente en llegar a la cercana
torre de origen mediaval, que parece ser tuvo
funciones de atalaya vigía, bajo los tajos donde
se halla los restos de la torre, aparecen unos
derrubios y entre ellos la boca de la sima de
Lifa. También tenemos constancia de la
existencia en esta zona, de una cantera de época
romana. Prosiguiendo el camino construido desde
aquí, para la instalación de la línea eléctrica,
podemos atravesar todo el valle de Lifa, donde
crecen exuberantes las cornicabras de porte
arbóreo, dicho bosque ha merecido que este
paraje, incluido en los límites del parque
natural Sierra de las Nieves, sea catalogado
como zona de máxima protección; el arroyo que
desciende por todo el valle es el arroyo del
Sabinal, también se ven encinas, acebuches,
pinos y gamones; éste arroyo se une al de la
Higuera y forman el río de El Burgo.
Punto de fuga
nº3, remontar el arroyo del Sabinal, desde
la parte trasera del cortijo, para penetrar en
un bonito cañón jalonado de arces, acebuches,
retamas y cornicabras y donde los lirios,
arisaros, gladiolos silvestres y algunas peonias
ponen la nota de color; al llegar al primer
salto de agua, podemos subir a unos roquedos
cercanos llamados Riscos de Lirio, son de gran
belleza y no es extraño ver recortando el
horizonte, el vuelo de alguna águila perdicera;
también abundan en la zona los zorros y
meloncillos, este último es la única mangosta
europea y fue dada a conocer por el célebre
botánico suizo Boissier.